Sindicatos y movimientos obreros en el Sur global

Ultimo epígrafe del libro Sourthern Insurgency. The coming of the Global Working Class, de Immanuel Ness (Pluto Press, 2016).

Los sindicatos surgieron en el siglo XX como representantes de una clase obrera, la del Norte, que ya no existe en la época presente. En el Sur, los sindicatos más consolidados son una herencia de los movimientos obreros involucrados en las luchas anticoloniales, y tienen poca conexión con la clase obrera contemporánea. Incluso la FNS (Federación Nacional de Sindicatos), la federación del trabajo de China, es un legado del pasado. Se formaron diversos sindicatos, y estos continuaron durante el periodo de independencia formal, defendiendo los derechos de los trabajadores de diversas formas. Como en el caso de Europa occidental, los sindicatos del Sur se formaron en periodos de lucha y explotación del trabajo, a menudo oponiéndose al colonialismo y allanando el camino a la independencia.

En la década del 2000, las configuraciones del trabajo que se han desarrollado en el Sur global proceden de previas movilizaciones obreras, que se formaron dentro de unos sistemas de partido que han delimitado el ámbito de la actividad y el poder de los oficios en el periodo posterior a la segunda guerra mundial. Estos regímenes definen los límites de los sindicatos oficiales, y muestran las fronteras para la expresión y el desarrollo de la militancia obrera no autorizada. Siempre queda abierta la cuestión de si los sindicatos existentes pueden contener el desarrollo concreto de organizaciones obreras independientes. Los ejemplos de China, India y Sudáfrica, estudiados aquí, revelan que los obreros industriales están involucrados en una acción directa contra la explotación institucionalizada, en varios ámbitos, y están planteando reivindicaciones que están reconformando los viejos sindicatos.Continue Reading

13 obreros de Maruti-Suzuki condenados a cadena perpetua en India

Traducción del texto publicado en el blog Maruti-Suzuki Workers Union.

El pasado sábado, los tribunales de Gurgaon (India) condenaron a cadena perpetua a 13 sindicalistas por la muerte de un directivo de Maruti-Suzuki durante los disturbios de 2012.

¡LIBERTAD PARA LOS OBREROS DE MARUTI! 13 MIEMBROS DEL SINDICATO DE MARUTI CONDENADOS A CADENA PERPETUA POR LUCHAR POR UNA ORGANIZACIÓN SINDICAL Y LA ABOLICIÓN DEL SISTEMA DE CONTRATOS

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La pasada tarde del 18 de marzo, trece hermanos nuestros (entre ellos 12 miembros del comité del sindicato Maruti Suzuki Workers Union) fueron condenados de por vida por la Gurgaon Additional Sessions Court, acusados de asesinato sin ningún fundamento. Cuatro obreros recibieron penas de 5 años. Otros catorce, de 3 años, pero ya han pasado 4 años en prisión, por lo que serán liberados. A los 117 obreros absueltos con anterioridad, que estuvieron 4 años en la cárcel, no sabemos quién les devolverá esos años perdidos. 148 ya pasaron 4 años en prisión incondicional desde 2012, y 2.500 obreros fueron despedidos ilegalmente y han sufrido una continua represión del Estado.Continue Reading

Sobre el valor de las huelgas y las coaliciones (K. Marx, 1853)

Extracto del artículo de Karl Marx titulado Política rusa contra Turquía.-Cartismo, escrito el 1 de julio de 1853 y publicado en New York Daily Tribune el 14 de julio del mismo año. Extraído de Marx&Engels Collected Works Volume 12, pág. 168-169.

[…] Las huelgas y las coaliciones de obreros progresan rápidamente, y en un grado sin precedentes. Tengo ahora mismo delante de mí informes sobre huelgas en todo tipo de fábricas en Stockport, huelgas de forjadores, hilanderos, tejedores, etc., en Manchester, de tejedores de alfombras en Kidderminster, de carboneros en Ringwood Collieries, cerca de Bristol, de los tejedores y los operarios de los telares de Blackburn, de los operarios de los telares de Darwen, de los ebanistas de Boston, de los blanqueadores, los rematadores, los tintoreros y los tejedores de telar mecánico de Bolton y alrededores, de los tejedores de Barnsley, de los tejedores de seda de Spitalfields, de los encajeros de Nottingham, de todo tipo de obreros del distrito de Birmingham, y de otras muchas localidades. Cada carta trae noticias de nuevas huelgas; el cese del trabajo se convierte en una epidemia. Las huelgas más grandes, como las de Stockport, Liverpool, etc., generan necesariamente toda una serie de huelgas menores, porque gran número de personas son incapaces de ofrecer resistencia a los patronos, a menos que apelen al apoyo de sus compañeros de trabajo en el Reino, y estos últimos, para ayudarlos, piden a su vez salarios más altos. Además, no aislar los esfuerzos de sus compañeros obreros, sometiéndose a peores condiciones, se convierte casi en una cuestión de honor y de interés en todas partes, y por lo tanto las huelgas en una localidad hallan eco en otras huelgas en los lugares más remotos. En algunos casos, la exigencia de salarios más altos es tan solo un ajuste de cuentas con los patronos pendiente desde hace tiempo. Este es el caso de la gran huelga de Stockport.Continue Reading

De la necesidad de una acción conjunta entre los sindicatos y la socialdemocracia (R. Luxemburgo, 1906)

Capítulo 8 de Huelga de masas, partido y sindicatos.

La condición más importante que debe cumplir la clase obrera alemana en el periodo de grandes luchas, que sobrevendrá tarde o temprano, es, junto a la resuelta firmeza y coherencia de la tác­tica, la mayor capacidad posible de acción, es decir, la mayor unidad posible del ala dirigente socialdemócrata de la masa pro­letaria. Sin embargo, las primeras tímidas tentativas para em­prender una acción de masas de mayor envergadura pusieron de manifiesto un importante obstáculo: la separación total y la auto­nomía de las dos organizaciones del movimiento obrero, de la socialdemocracia y de los sindicatos.

De un análisis detallado de las huelgas de masas en Rusia y de las condiciones en Alemania misma se desprende claramente que cualquier acción importante de lucha, si no ha de limitarse a una demostración aislada y debe, por el contrario, convenirse en una acción real de masas, no puede concebirse como una huelga del tipo que se ha dado en llamar política. En Alemania, los sindicatos participarían de igual modo que la socialdemocracia. Y no ya, como se imaginan los dirigentes sindicales, porque la socialdemocracia, debido a la inferioridad numérica de su organización, se encuentre obligada a recurrir a la colaboración de ese millón y cuarto de sindicalistas y no puede hacer nada «sin ellos», sino por una razón mucho más profunda: porque toda acción directa de masas y todo periodo de luchas abiertas de clase serán al mismo tiempo políticos y económicos. Si por cualquier motivo y en cualquier momento, se producen en Alemania grandes luchas políticas y huelgas de masas, se iniciará, al mismo tiempo, una era de gigantescas luchas sindicales, sin que los acontecimientos se pregunten si los dirigentes sindicales aprueban o no el movimiento. Si se mantuvieran apartados o trataran de oponerse a la lucha, la consecuencia será simplemente que los dirigentes del sindicato[1] serían marginados por el desarrollo de los acontecimientos, y las luchas, tanto las económicas como las políticas, serían llevadas adelante por las masas, se prescindiría de ellos.

En efecto, la división entre la lucha política y la lucha econó­mica, así como su consideración por separado, no es más que un producto artificial, aunque explicable históricamente, del perio­do parlamentario. Por una parte, la lucha económica se dispersa en el tranquilo y «normal» desarrollo de la sociedad burguesa, en una multitud de luchas parciales en cada fábrica y en cada ramo de la producción. Por otra parte, la lucha política no es di­rigida por las masas mismas en acción directa, sino, en conformi­dad con las formas del Estado burgués, por vía representativa, mediante la presión sobre el cuerpo legislativo. Una vez abierto un periodo de luchas revolucionarias, es decir, una vez que apa­rezcan las masas en el campo de batalla, desaparecerán tanto la dispersión de la lucha económica como la forma indirecta parla­mentaria de la lucha política; en una acción de masas revolucio­naria, las luchas política y económica son una sola, y el límite artificial trazado entre sindicato y socialdemocracia, como entre dos formas separadas y totalmente distintas del movimiento obrero, simplemente desaparece. Pero lo que se manifiesta con claridad en un movimiento de masas revolucionario, también es válido, de hecho, para el periodo parlamentario. No existen dos distintas luchas de clase del proletariado, una económica y una política, sino que existe una sola lucha de clases, orientada, por igual, tanto a la limitación de la explotación capitalista en el seno de la sociedad burguesa como a la abolición de la explotación junto a la misma sociedad burguesa.Continue Reading

Resoluciones del Congreso de Stuttgart de la Internacional Socialista (1907) acerca de las relaciones entre los partidos políticos y las sociedades obreras y sobre la emigración obrera

Cuarta Sesión del Congreso de Stuttgart. Extracto de Congresos sociales en 1907 (pág. 24-27).

Se discute la cuestión de las relaciones que deben mediar entre los partidos políticos y las Sociedades obreras. La Comisión propone al Congreso que declare la necesidad de una cooperación íntima entre la acción política y la acción económica de la clase obrera. El partido socialista y las Sociedades obreras tienen idénticos fines que cumplir en la lucha por la emancipación del proletariado; deben, pues, trabajar juntos, sus relaciones deben ser íntimas. El Congreso debe invitar a sus tareas a las Sociedades obreras. Así opina la mayoría de la Comisión; la minoría de la misma es partidaria de que el Congreso manifieste esta opinión de manera todavía más enérgica.

Intervienen en el debate el ponente Beer, de Viena; De Leon, de los Estados Unidos; De Brouchère, de Bélgica; Vaillant, de Francia; Troelstra, de Holanda. Se aprueba la moción presentada por la mayoría de la Comisión, cuyo tenor es el siguiente:

I. Para la completa liberación del proletariado de los grilletes de la esclavitud espiritual, política y económica, es tan necesaria la lucha de la clase obrera en el terreno político como en el terreno económico. Así como la misión del partido socialista está en la lucha política por el proletariado, la misión de las Sociedades obreras consiste en la lucha económica por el proletariado. El partido y las Sociedades obreras tienen, pues, en la lucha por la emancipación, misiones de igual valor que cumplir.Continue Reading

Los dos métodos de la política sindical (Rosa Luxemburgo, 1907)

Publicado originalmente en Die Neue Zeit, 24 de octubre 1907 (vol. I, nº 4). Traducido del inglés.

El nuevo acuerdo salarial al que ha llegado el sindicato de impresores aparentemente no tiene ninguna relación con las deliberaciones de la conferencia del Partido celebrada en Mannheim, pero visto más de cerca se puede considerar que constituye un riguroso comentario acerca de ésta. En Alemania, el sindicato de impresores hace tiempo que es visto como modelo de la fuerza y el éxito que puede lograr una organización proletaria en la esfera económica en la medida en que permanezca dentro del “terreno positivo” de los intereses cotidianos de los obreros y se cierre prudentemente en banda a las tentaciones del “romanticismo revolucionario”. A través de su historia, desde su voluntaria aceptación de las disposiciones que la reacción impuso con las leyes anti-socialistas hasta este último acuerdo salarial, el Sindicato Alemán de Impresores constituye la clásica expresión de esa política sindical que prefiere la paz a la lucha, los acuerdos con el capitalismo al conflicto, la neutralidad política al abierto apoyo al Partido Socialdemócrata, y que, llena de desprecio hacia el “fanatismo” revolucionario, tiene su modelo ideal en los sindicatos de tipo inglés. Ha sido necesario mucho tiempo, pero hoy los frutos de semejante política se han vuelto obvios incluso para los más miopes. Durante décadas, el espléndido estado de la tesorería, las seguras condiciones de vida, las condiciones de trabajo relativamente favorables y la larga paz que reinó en el oficio, parecían constituir el mejor testimonio de los métodos de los impresores. Hoy, con el nuevo acuerdo salarial, todo este espléndido edificio parece que se ha derrumbado de golpe. En lugar de un éxito económico excepcional, los impresores, a pesar de toda su tenacidad, perseverancia, discreción y moderación, y a pesar del espléndido estado de su organización y de sus fondos, finalmente han permitido que el capital les dicte unas condiciones tan vergonzosas que una ola general de indignación está recorriendo las filas de esta sociedad de sangre normalmente fría. No obstante, para poder evaluar adecuadamente y en su completa dimensión el fiasco del llamémosle método inglés de política sindical, debemos comparar el reciente acuerdo salarial del Sindicato Alemán de Impresores con los últimos logros de los impresores rusos, lo cual equivale a comparar los frutos de largas décadas de trabajo pacífico con el resultado de tan solo un año de agitación revolucionaria.Continue Reading

Las luchas en el sector de la logística en Italia

Publicado en la web Break Their Houghty Power.

Este esbozo se basa en unas conversaciones mantenidas en octubre de 2015 con algunos militantes y simpatizantes del pequeño sindicato italiano SI Cobas (Sindicato Interprofessionale/Comites di Base), que ha venido convocando y ganando varias huelgas militantes durante los pasados años, involucrando principalmente a los obreros inmigrantes que trabajan los almacenes y el sector de la logística.

Loren Goldner, diciembre 2015.
lrgoldner@yahoo.com

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Las grandes empresas de logística llevan en Italia 15 o 20 años valiéndose de unas “cooperativas” como principal medio de contratación de camioneros y mozos de almacén (facchini).

No hay que confundir este tipo de cooperativas con su forma tradicional, que organizan los trabajadores con propósitos solidarios. Estas cooperativas son traficantes de trabajo, a menudo literalmente una mafia que ha ido emergiendo conforme los grandes sindicatos italianos han ido decayendo (CGIL, CSIL, UIL). Actúan de intermediarios entre los obreros y las grandes compañías, y compiten entre ellas por conseguir trabajo al precio más bajo. Algunas grandes compañías como IKEA, fabricante sueco de muebles y aparatos domésticos, no contratan a los trabajadores directamente, sino que les invitan a unirse a una de estas cooperativas. Al revés que los esclavistas, que tienen cierto interés en mantener a sus esclavos vivos y en condiciones de trabajar, a las cooperativas llega un enorme flujo de obreros inmigrantes que son exprimidos y luego desechados. La ilegalidad de estas prácticas no se tiene en cuenta, la ley sólo se emplea para partirles la cara a los huelguistas y encerrarles. Los grandes sindicatos miran para otro lado. Un obrero extranjero despedido se arriesga a perder el permiso de residencia y a verse obligado a esconderse. Los obreros son llamados a trabajar “cuando se les necesita”, y quienes causan problemas pueden quedarse en casa fácilmente varias semanas o meses, o ser trasladados a almacenes lejanos. Los jefes controlan las tareas, prohíben las pausas para ir al baño y hacen todo lo que pueden por deshumanizar a los trabajadores. Hablando mal italiano, o sin saber nada de italiano en absoluto, estos llamados “obreros emprendedores” no conocen su derecho a la ayuda y la sanidad públicas, por mínimo que sea.Continue Reading

El resurgimiento de los sindicatos independientes en Egipto. (En memoria de Giulio Regeni)

Reproducimos el último artículo publicado por Giulio Regeni en Il Manifesto, antes de ser secuestrado, torturado y asesinado por la policía egipcia por haberse atrevido a interesarse, a estudiar y a divulgar la amenaza que supone para el régimen egipcio el resurgimiento de un movimiento proletario independiente, que ya fue determinante en la caída de Mubarak en 2011.

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Nota del editor: Publicamos póstumamente este artículo de Giulio Regeni, estudiante italiano que residía en El Cairo, donde preparaba su tesis doctoral. Desaparecido el 25 de enero, el miércoles 3 de febrero su cuerpo torturado fue hallado en una cuneta, en la ciudad. Dado que el tema de los sindicatos independientes es bastante polémico en Egipto, Regeni nos pidió en enero que publicáramos este artículo bajo un seudónimo. Hoy lo publicamos con el verdadero nombre del autor.

El presidente Abdel Fattah al-Sisi domina el Parlamento egipcio, con más policía y fuerzas militares que nunca antes en la pasada historia del país, y Egipto está entre los países que menos respetan la libertad de prensa. Aun así, los sindicatos independientes no se resignan. El Center for Trade Union and Worker’s Services (CTUWS), todo un ejemplo de sindicalismo independiente en Egipto, acaba de celebrar una vibrante asamblea.Continue Reading

INDIA. Obreras en lucha, como explotadas y como mujeres

Traducido de la revista Échanges nº 153, otoño 2015.

LA LUCHA DE CLASES EN LA INDIA

Se habla mucho de China y de las diversas luchas que se desarrollan allí, pero muy poco de la India, cuya población es hoy superior a la del antiguo Reino del Medio[1] (1.300 millones de habitantes en un territorio 3 veces más pequeño).

Sin duda, desde el punto de vista económico, India está bastante lejos de China, con un PIB que representa un 20% del chino y que incluso es inferior al de Francia. Pero este país no deja de ser un elemento importante en el tablero económico y político mundial, y tiene unas altas tasas de crecimiento. Como sucede en todos los países en desarrollo, el impulso económico conlleva importantes migraciones, con el desplazamiento de población desde el campo a las ciudades, el paso de la condición de campesino a la de explotado por el capital, y la relativa supresión de los particularismos locales tradicionales, culturales y de los lazos familiares. Pero, también como en todas partes, esta proletarización provoca el surgimiento de la lucha de clases, con tanta más fuerza en la medida en que la propia lucha demuestra abiertamente que las condiciones de explotación son como ya nos las imaginamos. Junto a esta lucha central, existen otras luchas específicas ligadas al desarrollo del capital industrial: contra la apropiación de tierras para los proyectos de infraestructuras y contra las distintas formas de contaminación del agua y del aire que implican estos proyectos[2].

LA SITUACIÓN DE LA MUJER Y DE LAS MUJERES PROLETARIAS

En India, las relaciones de clase se han vuelto más complejas debido a la persistencia del sistema de castas y la situación de hecho de las mujeres, sobre todo de las que trabajan. Con una situación industrial y agrícola particular en sus diferentes Estados, la India atraviesa los mismos problemas de emigración hacia el centro que el resto de países. Pero, sea cual sea la naturaleza de su trabajo, la mujer sometida a la explotación, a la que en general ya se considera de por sí inferior al hombre, tiene que sufrir en la empresa, además de su situación específica como mujer que trabaja, además del dominio de los hombres en el hogar si está casada, también la coerción de una dirección casi en su totalidad masculina (aunque el 80% de los trabajadores son mujeres). En la jerarquía sindical, el aparato burocrático del sindicato también es totalmente masculino, incluso en estas ramas industriales de mano de obra femenina.Continue Reading

Capitalismo y sindicatos

A continuación reproducimos el texto “Capitalismo y sindicatos”, publicado en dos partes en la revista Lucha y Teoría nº 3 y nº4 (1975). Pensamos que el texto presenta un doble interés: por un lado, porque se dedica a analizar una cuestión que la tendencia de la “autonomía obrera” no logró resolver en aquella época y que hoy está a la orden del día: la cuestión sindical; y por otro lado, porque el desarrollo del análisis, en forma de artículo/contra-artículo crítico, es un buen ejemplo de cómo se deberían tratar las divergencias teóricas en toda organización proletaria, dejando que cada tendencia se exprese también en los órganos de prensa.
Dentro del pequeño grupo de trabajadores que colaboran en la publicación de El Salariado también existen diferencias a la hora de valorar la forma sindicato como organización de clase para la lucha económica. El compañero que firma los artículos con el seudónimo de Proletario para sí comparte hasta cierto punto el análisis histórico que se hace en este artículo, según el cual el sindicato ha caducado como forma organizativa al servicio de la clase. Mientras que el resto de miembros se acerca más a las posturas que se expresan en las respuestas críticas, sin llegar tampoco a coincidir por completo.
Y es que, al fin y al cabo, las diferentes visiones que se defienden en este texto terminan coincidiendo en lo esencial: “En este sentido, creemos que los actuales niveles de organización y conciencia de la clase obrera, así como los caracteres de la sociedad capitalista de hoy (crisis, grado de avance tecnológico, socialización del consumo, manipulación ideológica, problemática de la vida cotidiana, etc.) apoyan y dan base a las teorizaciones y a las prácticas dirigidas a la construcción de nuevas formas organizativas y de lucha que rompan la división entre lucha económica, lucha política, lucha ideológica, etc.”. Estas teorizaciones y estas prácticas dieron lugar a la fracasada experiencia de la “autonomía obrera” hace casi 50 años.Continue Reading